Bueno señores, el payo Marcos ha vuelto a hacerlo. Segunda carrera y ha terminado en el puesto 24 una vez publicada la clasificación definitiva. Ha adelantado un puesto respecto a la primera carrera. Dentro de 23 carreras gana.
Esta vez la Casa de Campo nos recibía con lluvia que amainó para convertirse en una llovizna intermitente durante la carrera. A Marcos no le hacía gracia pero tiene que aprender y decidimos correr. No fuimos los únicos locos, 86 corredores tomaron la salida.
Abro un paréntesis para comentar que apenas llegamos fuimos asaltados por uno de los directores del equipo del patronato municipal de deportes de Fuenlabrada, interesado en fichar a la joven promesa. Las negociaciones están en marcha y de momento, la cosa pinta bien.
La carrera no ha tenido nada que ver con la primera, la salida ha sido a mil por hora, Marcos tiene peor posición en la parrilla pero pasa mejor la primera curva, pocos puestos por detrás del maillot amarillo, Ángel del Campo (Parla). No será suficiente, antes de acabar la primera vuelta la historia de esta prueba estaba escrita. Ataque durísimo en la primera subida del que salen cinco escapados con un papel destacado de David de Pablos (empezamos a hacer la pelota al Fuenlabrada) a la postre 7º en meta y por detrás una verdadera escabechina, el líder pasa en un primer grupo y Marcos en el segundo. En ese momento sólo perdía 20 segundos con la cabeza.
En la segunda vuelta, cinco corredores saltan del primer grupo pero sólo dos lograrán llegar al quinteto de cabeza ya en la tercera, Raúl Sánchez (del equipo granadino Fermasa) que acabaría ganando la carrera y David Casillas (Parla) que terminaría la etapa segundo y conseguiría la victoria final en la Challenge. Los otros tres quedan en tierra de nadie hasta meta.
Apretando los dientes en la subida
Desde ese momento la carrera no tiene historia, las diferencias entre los escapados y el grupo del líder, que no encuentra colaboración, crecen cada vuelta así como las que hay entre este grupo y el de Marcos. Unos y otros se resignan, pocos trabajan, toca guardar para el final. Por detrás un verdadero rosario de pequeños grupos.
Llegados a la última vuelta Marcos afronta la subida en la cabeza de su grupo que cuenta con una veintena de corredores, responde a varios ataques y atraviesa la meta como cuarto de esa veintena.
Entrada en meta
Lo dicho, 24º. ¿No está mal, no? Sólo terminaron 54 partidos en seis grupos.
El domingo que viene Numancia de la Sagra, creo.
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